HEIFER International México ha decidido invertir en la utilización de esta tecnología como herramienta básica para el trabajo en campo, de manera que se tenga un panorama mucho más completo de las áreas en las que se tiene incidencia.

El uso de drones tiene un futuro asegurado en la agricultura. Más incluso, tiene un presente, pues en algunos países ya hace tiempo que operan en los campos. Esta tecnología ofrece múltiples posibilidades para la agricultura. Los drones pueden sobrevolar los campos de una forma rápida y captar información diversa gracias a sus sensores. Esto permite que aquellos que gestionan los cultivos tengan a su disposición una herramienta para controlar e incrementar la productividad.
Un solo dron puede monitorizar cientos de hectáreas de forma precisa, evaluando las condiciones del terreno, con el fin de recoger información sobre la hidratación, la temperatura o el ritmo de crecimiento de los cultivos. Una de las funciones más importantes que se atribuyen a estos dispositivos es la localización prematura de enfermedades. De esta forma se pueden evitar plagas que arruinen parte de la cosecha.
Toda esta información proporciona un ahorro de costes significativo para los agricultores. Evitar las plagas también contribuye a reducir la cantidad de productos químicos que se emplean en los cultivos. No solo las cosechas crecen de forma menos artificial sino que no es necesario comprar tantos herbicidas y pesticidas como hasta ahora. Cuando haya que utilizarlos, los propios drones los pueden arrojar, al igual que los fertilizantes.
Los dispositivos pueden controlar cómo funciona el riego y también sirven de improvisados espantapájaros, al mantener alejadas a las aves. Son capaces de enviar fotografías e incluso vídeo en tiempo real a un centro donde se observe el estado de los cultivos.
De esa manera se obtendrá con precisión información agronómica útil a partir de los productos geomáticos generados mediante las imágenes aéreas como: determinación del grado de cobertura del cultivo, biomasa y predicción del rendimiento. Por otro lado, el empleo de imágenes de alta resolución obtenidas mediante drones, junto a su adecuado tratamiento, resulta muy útil en la monitorización del crecimiento y desarrollo del cultivo, así como en medidas para el Monitoreo y Evaluación de nuestros proyectos.
En línea con ello, se realizó el primer Piloto de Vuelo, realizado en el «Barrio de la Soledad» en la zona del Istmo, Oaxaca, donde los asistentes de Heifer y de las demás instituciones han podido constatar lo que el correcto uso de la tecnología hace por sus tierras.
Para Heifer International este ejercicio es una apuesta para alcanzar todos esos niveles, así como la mejora en la implementación de sistemas silvopastoriles que permitan conservar mejor el suelo; un mayor rendimiento y duración de las pasturas; mirar las posibiliades de alimento nutricional más balanceado para los animales; identificar la sombra para el ganado con la planificación de árboles. Es por ello que la prueba piloto se realizó en Oaxaca Región Istmo.